Desde muy pequeña paseaba con mi madre por la calle Vallespir, y tengo que decir que ese local siempre me pareció especial, una bodega de antaño, pequeña y vacía de gente pero con mucha personalidad. Parecía la herencia de la herencia de la herencia de muchos, y con el paso del tiempo se había convertido en una tienducha con aspecto a antiguo heredada por alguien que ya no había tenido suerte con el negocio por no ser actual.
Incluso cuando iba a los Maristas y pasaba cada día por la calle, a pesar de la ausencia mental de la edad por los detalles, me fijaba en su nevera de alimentos embutida entre tanto vino.
Uno de los inconvenientes de la juventud es que tu barrera física, tu barrio, se amplia y te acercas a la pequeña barcelona, y por momentos, olvidas los rincones de tu barrio que tanto te acompañaron en la adolescencia. Y eso fue lo que me pasó, olvidé todos los lugares que conocía y que habían sido especiales para mi.
Cuando empecé a salir con Wookie, me recordó que existía ese local y que incluso se había traspasado y se había convertido en un pequeño restaurante con un aire singular. Y fuimos a visitarlo.
El local lo había adquirido dos cubanas con muchas ganas de trabajar, con mucho gusto y un trato realmente simpático y exquisito. Nos enamoramos. Tuvieron la delicadeza de mantener toda la estética de la bodega sin perder detalle, manteniendo los colores verdes, las pizarras con los nombres de los vinos, todo el mobiliario... Y decidieron comprar excelente materia prima y crear platillos típicos de aquí y de allí con cuidadas recomendaciones de vinos, cavas y licores. Con el tiempo, no hubo más remedio que recortar espacio de cocina y almacenaje y hacer la sala más grande con 4 mesitas más.
Es un local muy pequeñito, pero no me gustaría por nada del mundo que cambiase a más. Nosotros lo hemos visitado desde hace años, hemos visto la evolución y todavía nos encontramos a muchos clientes fieles a "las cubanas", que así le llamamos nosotros.
Así que si quieren ir, no duden, pero vayan tempranito ya que siempre está lleno. Abren de Lunes a Viernes a las 19:00h y los Sábados a la 20:00h.
Platos recomendados: las costillas aderezadas con miel, la ensalada del celler y la oreja! Aunque podría recomendar cualquier plato de la carta!
Celler del Nou Priorat, Sants
Vallespir, 19
93 490 59 52
