Flan de Leche Condensada

Mi madre trabajó desde muy pequeña en la casa de un médico y tuvo que aprender forzosamente a cocinar y a limpiar. En la postguerra muchas familias tuvieron que enviar a sus hijos, algunos sin cumplir los diez años de edad, a trabajar en casa o campos de otros para poder alimentarse y sobrevivir. Eso le ocurrió a mi abuela.

Mi abuela materna, Juana, tuvo 9 hijos. El primero murió de escarlatina con muy pocos años de edad y el resto llegaron aproximadamente entre 1940 y 1954. En la época en que tuvieron su última hija, mi abuelo empezó a enfermar irremediablemente y los hijos tuvieron que emigrar a diferentes ciudades y trasladarse a casas de otros para "servir". Mi abuelo falleció hacia el 1958 después de sufrir una larga enfermedad cardíaca que se complicó con una crítica pneumonía. La falta de recursos, la pobreza que propinó la guerra en España hizo que mi madre y mis tíos dejasen de estudiar y tuviesen que trabajar entre frío y tristeza.

A pesar de todo, mi madre tuvo el privilegio de caer en casa de un Médico y le enseñaron a leer y escribir al mismo tiempo que subida en un taburete apenas alcanzaba a fregar los platos de los Señores. Mi madre aprendió maravillosas recetas que aún a día de hoy cocina con cuidado para nosotros, muchas de ellas las prepara para Navidad como muestra de algo especial, casi como si de comida de ricos se tratase.

Empezamos con la primera receta que enseñó Mercedes (la mujer del médico) a mi madre.

Flan de Leche Condensada

Ingredientes:

• 4 ó 5 huevos
• 1 bote pequeño leche condensada
• 2 botes de leche entera (podemos usar la medida del bote de leche condensada para la proporción)

Para el caramelo:

• Tres cucharadas de azúcar con copete
• 1 cucharada de agua

Calentamos nuestro horno a 200 grados, sólo la parte de abajo.

Preparación:

1. Preparamos el caramelo en un molde de metal (si tenemos fuego de gas, podremos hacerlo encima de este con el molde moviéndolo contínuamente). Añadimos el azúcar y el agua y vamos moviendo el molde con la ayuda de nuestras manos para cubrir a la perfección el fondo. No debemos hacerlo con cuchara ya que se nos quedaría pegado!
2. Lo retiramos y lo dejamos enfriar.
3. En un bol batimos los huevos dejándolos muy espumosos, añadimos la leche condensada y la leche entera y volvemos a batir. Es importante que la mezcla quede espumosa, de esta forma el flan tomará una textura suave y no compacta. Vertimos la mezcla en el molde.
4. En una bandeja añadimos agua y en el medio colocamos el molde de forma que pueda cocer al baño maría. Lo insertamos en el horno y esperamos aproximadamente una hora.
5. A la hora podemos introducir un palito en medio del flan comprobando que haya cuajado, si no es el caso, podemos esperar un poco más en el horno.
6. Una vez haya cuajado, retirar del horno, esperar a que enfríe y colocar en la nevera hasta el momento de servir.
7. Cuando queramos servirlo, colocaremos una bandeja con la forma del molde y le daremos la vuelta con cuidado de que no se rompa. De esta forma el caramelo quedará en la parte superior y se derramará adornando todo el flan